Testimonios
" Ahora les comentaremos algunos testimonios interesantes, aportados por nuestros pacientes."
-La Clinica de la Columna
Diego Mellino
Mi propio caso
Bueno a continuación les voy a contar el caso más grave y significativo que me toco vivir, “Mi propio caso.”
En el año 2001, junto con mi colega y amigo Hernán Novarini, decidimos hacer un viaje desde EEUU a Argentina en moto. El propósito del viaje, además de ser un gusto personal, era difundir el conocimiento de la quiropraxia dando charlas en algunos centros asistenciales.
También estábamos vinculados con asociaciones como “Felices los Niños” (para la lucha contra los chicos de la calle), “Fundación Huésped” (para la lucha contra el sida), y se podían hacer donaciones a través de la pagina web en el cual se seguía nuestro viaje.
Así que en Junio del 2001 arrancamos desde EEUU. Inicialmente el viaje estaba programado para hacerlo en 6 meses. Luego de 15 días en la ruta , nos dimos cuenta que tardaríamos el doble, casi 12 meses. Debido a la hospitalidad de la gente y su interés por la quiropraxia, en cada lugar que íbamos parando nos retrasábamos mucho con respecto al calendario previsto.
A los 3 meses de andar , ya nos habíamos hecho a la idea de que el viaje iba a llevar un año, pero lamentablemente se nos termino antes de lo previsto. El 29 de septiembre , luego de pasar por “LA RUTA DE LAS PIRAMIDES” cerca de Ciudad de Mérida en México, tuvimos un accidente.
Era cerca del mediodía. En la ruta había un gran pozo y por intentar esquivarlo me caí en la banquina. Por desgracia que en ese lugar estaba lleno de piedras muy grandes. Se trabo la rueda delantera y salí despedido. Caí de cabeza y mi cuerpo se doblo a la mitad, fracturándome la columna vertebral. En ese momento quede boca arriba en el piso sin sentir absolutamente nada desde mi pecho hacia abajo, por suerte mi amigo y colega Hernán estaba sin un rasguño y pudo asistirme. A partir de ahí comenzaron los peores 20 días de mi vida.
Me trasladaron a la ciudad de Mérida para poder hacerme todos los estudios necesarios. Los resultados mostraban un aplastamiento de la columna y una fractura en 3 segmentos dorsales, la D7, D8, D9.
La vértebra Dorsal 8 era la más afectada y acuñada y la que se había desplazado hacia dentro de mi medula causando la parálisis total de mi cuerpo del pecho hacia abajo.
Ahí comenzaron todas las diferentes teorías. En ese momento estaba con 2 neurocirujanos, 2 traumatólogos y 1 neurólogo, que insistían y me aseguraban que si no me operaban en 24 hrs., no iba a caminar nunca más. No conforme con este planteo, empezamos a contactar a unos colegas. Fue así que Lou Corletto un profesor de la Universidad viajo a Mérida al día siguiente para verme y ver los estudios. Ahí tome la difícil decisión de no operarme y empezar a ajustar y alinear mi columna (fracturada) cada 2 horas.
La tarea estaba a cargo de Lou y de Hernán. A las pocas horas de empezar a mover mi vértebra empecé a tener una sensación muy rara por mis piernas. Era una sensación de fuego interno, aunque cuando me tocaban no sentía nada. Luego de cada ajuste poníamos un peso en la columna para ayudar a que la vértebra se desplace fuera del canal medular.
De a poco empezamos a espaciar los ajustes, a medida que iban cambiando mis sensaciones.
Pase 19 días en México sin conseguir que me trasladaran . Los 19 días más largos de mi vida. Ningún avión me quería trasladar dado el reciente atentado a las torres gemelas en EEUU el 11 de septiembre. Finalmente pude viajar.
Al llegar BsAs, Hernán siguió realizando las alineaciones, ya un poco más espaciadas. En este momento estábamos en 6 por día.
Al decidir no operarme tuve que estar en cama boca abajo más de tres meses esperando que suelden mis vértebras.
Tiempo en el que Hernán seguía movilizando la vértebra fuera de la medula.
Después tuve que empezar a aprender a gatear nuevamente y finalmente tuve que aprender a caminar .
Como verán para mí la quiropraxia no es solo una profesión que nos permite ayudar a muchísima gente día a día, sino que es lo que me salvo la vida, lo que me permitió que hoy vuelva a caminar.
GRACIAS A DIOS QUE ME ILUMINO Y ME DIO AMIGOS COMO HERNAN NOVARINI Y LOU CORLETTO.
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Diego Glielmi
Soy Diego Glielmi tengo 40 años. Comence el cuidado el 24/09/2010.
Vine al centro porque tenía dolores de cabeza y mareos, tenia zumbidos en el oído que me perturbaba bastante. Anímicamente estaba angustiado
A partir del 1º ajuste quede relajado y con sueño.
A medida que avanzaba mi cuidado, se produjeron cambios en el humor fue fundamental.desde el primer ajuste tuve cambios en lo anímico y mi vitalidad cambio mucho.
Recuperé las ganas de hacer muchas cosas, cambio hasta la imagen, mi postura física, y por sobre todo una visión más positiva.
¿Querés comentar algo más de tu experiencia personal?
Los comentarios que puedo decir son más que positivos, pero quiero hacer hincapié sobre el clima que se respira en el lugar es de paz y armonía y felicitar a todos por la calidad humana del equipo de trabajo.Gracias a todos !!
Elena Cabrera
Soy Elena Cabrera tengo 42 años. Comence el cuidado el 4/8/2008
Vine al centro porque tenía dolores de columna desde hace varios años, escoliosis desde los 13 años, dolores lumbares, inflamación del nervio ciático, dolor en la zona del coxis, problemas cervicales y en el codo.
A partir de los 1º ajustes, lo primero que note fue la desaparición de los dolores.
A medida que avanzaba mi cuidado, se produjeron cambios mejore muchísimo, al poco tiempo traje a mis hijos, uno de 18 años con escoliosis y problemas de rodillas y mi hija de 16 con problemas cervicales, mareos y una pierna más corta.
Si me preguntan si deben ir a un quiropráctico les digo si con mayúsculas
¿Por qué sufrir? Si todo se soluciona con accionar, levantando el teléfono, solicitar una consulta y se terminan todos tus dolores.
Damián Iglesias
Soy Pablo Damián Iglesias, tengo 38 años. Comencé el cuidado el 3/12/2010
Vine al centro para mejorar mi calidad de vida. Si bien no tenía un problema en particular, sentía que necesitaba “acomodar” mi columna.
A partir del 1º ajuste, note relajación y un estado como de andar en el aire, como flotando.
A medida que avanzaba mi cuidado, se produjeron cambios: en general en todo el cuerpo, me sentí más aliviado y, como entreno con aparatos me hizo muy bien, es un buen complemento.
Recuperé mis ganas de entrenar, estaba un poco apagado y me ayudó a sentirme mejor.
¿Qué opinas de la Quiropraxia? Me encontré con algo que desconocía y me sorprendió en todo aspecto, creo que todos tendrían que hacer quiropraxia, yo de hecho traje a mis dos hijos.
¿La recomendarías a otra persona? ¿Por qué? Si! Recomendé a amigos con problemas de ciático y dolores de espalda porque se que acá se van a recuperar.
Mirta Graciela Arce
Soy Mirta Graciela Arce tengo 60 años.
Comencé el cuidado el 12/7/10
Vine al centro porque tenía fuertes dolores en los hombros, cuello y lumbalgia, cintura y caderas.
Anímicamente estaba cansada y cada 6 u 8 meses se presentaban los problemas en lumbares y recurría a calmantes.
A partir del 1º ajuste, lo primero que note fue un descontrol, alergias y anginas. Calambres que iban y venían.
A medida que avanzaba mi cuidado, se produjeron cambios desaparecieron las alergias, los dolores de hombros, espalda y el nervio ciático. Está todo controlado.
Me siento bien, estoy perdiendo el miedo a agacharme y si, es verdad, me siento más vital.
Recuperé mis fuerzas, confianza y movilidad. Además estoy perdiendo peso.
Ahora puedo decir que es un cuidado simple y muy conveniente para cualquier persona y edad. Es más lento pero más seguro.Lo creo muy conveniente para los niños recién nacidos, para corregir males prematuros que con el tiempo se hacen crónicos.
Mariela Medina
Soy Mariela Medina tengo 40 años. Comencé el cuidado el 19/8/2010
Vine al centro porque tenía inestabilidad al caminar y de un dia para el otro sufrí un fuerte dolor en la cintura. El diagnóstico clínico fue lumbalgia, etc., etc.
Anímicamente estaba mal, ya que los médicos me dijeron que no iba a poder realizar mis actividades deportivas como antes.
A partir del 1º ajuste, lo primero que note fue mucho sueño.
A medida que avanzaba mi cuidado, se produjeron cambios fue en forma paulatina, lentamente retome mis actividades deportivas.
Mi estado anímico, mi vitalidad volvió a la normalidad.
Recuperé todo.
¿Qué opinas de la Quiropraxia? Que es una alternativa sana para mejorar nuestra calidad de vida.
¿La recomendarías a otra persona? ¿Por qué? Por supuesto que si, me devolvió todo lo que me gusta hacer.
María Inés Jascalevich
Soy María Inés Jascalevich tengo 62 años. Comenceel cuidado el 15/9/2010. Desde hace 24 años, comencé a perder la audición hasta que llegue a la sordera bilateral (ambos oídos) profunda.
No obstante sigo trabajando incansablemente, entre personas oyentes, con esfuerzos que pocos se pueden imaginar, porque lo mas difícil de la lectura labial, no es poder leer, sino que el que habla lo haga vocalizando las palabras y eso es muy difícil.
En los últimos meses noté algunos dolores en la columna, que atribuí a mi mala postura. No recuerdo bien como, porque son infinitas las cosas que uno lee en Internet, encontré la palabra Quiropraxia. Cuando me hicieron el primer ajuste, sentí lo mismo que una maquina cuando le ponen aceite y desaparecieron mis partes oxidadas. No solo empecé a poder moverme con más soltura, sino que además comencé a oír, no recuperé el 100% de la audición, pero si una parte y el primer día pude hablar un poco por teléfono y puedo discriminar un poco la música.
Sigo en carrera porque es evidente que algún nervio estaba por ahí anudado entre las vértebras, que poco a poco se fueron desacomodando por las malas posturas y tensiones y paulatinamente espero que vuelvan a su lugar de la mano de la Quiropraxia.
Me siento mejor en general pero como en mi caso particular, la discapacidad auditiva era un problema muy grande y mi resistencia a darme por vencida, mucho mas grande aún todo lo demás pasa a un segundo plano.
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Eilat Jelin
Soy Eilat Jelin tengo 41 años. Comence el cuidado el 1/3/2011
Vine al centro porque tenía problema crónico en la cadera por una lesión, cosa que me generaba mucho dolor al caminar, no podía caminar una cuadra sin dolor.
Anímicamente estaba mal, ya había probado varias cosas y no veía mejoras. Estaba preocupada por como estaría en el futuro, como sería llevar un embarazo.
A medida que avanzaba mi cuidado, se produjeron cambios pasé de no poder caminar una cuadra a caminar 30!!!
Mejoré mucho, ver que el problema tenía solución, por más que fuera un proceso que toma su tiempo.
Recuperé mi movilidad, mi energía. El no poder caminar me generaba mucho malestar.
Esto es como las cosas buenas y duraderas de la vida: es un proceso, toma tiempo, tiene altibajos y necesita paciencia, pero LO VALE!!
¿Qué opinas de la Quiropraxia? Es el único método que hallé (probé yoga, kinesiología, y otras terapias) que parece darme una solución a largo plazo.
¿La recomendarías a otra persona? Absolutamente! Casi todos tenemos problemas con la columna, la quiropraxia mejora mucho las disfunciones generados por ella.
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